El verdadero problema no es la data… es la cantidad de Dash-bored.

Las plantas industriales están inundadas de dashboards.

Queremos medir TODO pero tooodo: producción, eficiencia, energía, seguridad… y terminamos enredados de tanta información.

Si todo es prioridad, nada es prioridad.

Repítelo de nuevo.

Si todo es prioridad, nada es prioridad.

La clave no es más datos, sino datos que impulsen decisiones.

Demasiada información NO es sinónimo de mejor gestión.

Como lo hago yo, defino que voy a medir según estos criterios:

➜ Que genere impacto en los objetivos estratégicos.
Si no impulsa la rentabilidad, eficiencia o sostenibilidad, es solo ruido.

➜ Que sea accionable.
Si el dato no lleva a una decisión o mejora clara, no vale la pena medirlo.

➜ Menos es más.
Medir < 5 KPIs críticos — de ser posible 3 — es mejor que 50 métricas irrelevantes.

➜ Tiempo real vs. histórico
Define qué indicadores requieren monitoreo en vivo y cuáles son útiles para análisis de tendencias.

Menos ruido, más estrategia.

¿Cuántos dashboards tiene tu planta? Si no puedes contarlos en 10 segundos, estás atrapado en el Dash-bored.