No estudies administración

EXPERIENCIASADMINISTRACIÓN

Andres Salas

1/6/20252 min read

NO ESTUDIES ADMINISTRACIÓN.

Cuando estaba estudiando administración en la escuela de negocios, un amigo me dijo que la administración es una cualidad con la que se nace. Que las universidades enseñan teoría, pero que las cualidades de un administrador, no se pueden aprender en los libros o la universidad. En ese momento no le creí o, mejor dicho, no le entendí. Para explicar su punto de vista, mejor les cuento una historia.

Hace algún tiempo un arquitecto consiguió dos contratos, con dos clientes diferentes. Dado que las dos obras se hacían al mismo tiempo, se vio en la necesidad de contratar a un residente de obra para supervisar el contrato más pequeño. Entonces recordó que su sobrino acababa de obtener un Máster en Administración de Empresas y estaba buscando empleo. Entonces, el arquitecto llevó a su sobrino a la obra y le dijo:

“Tienes dos trabajadores bajo tu cargo. Ellos entran a trabajar a las 8 am y salen a las 5 pm. Tu tarea es presionarlos para que trabajen, comprar los almuerzos, y comprar cualquier material que haga falta para que la obra no se detenga”.

Hasta aquí todo bien. Los días pasaron rápido y el sobrino hizo exactamente lo que se le había pedido. Finalmente, llego el fin de mes y el arquitecto lo llamo.

“Sobrino, necesito que me pases los siguientes datos”.

  1. Detalle de compra de materiales de construcción, donde se indique: ¿Qué se compró? ¿Quién lo solicito y para qué fue utilizado? Esto lo necesito para llevar el control de gastos de la obra.

  2. Detalle de las horas de entrada y salida de los albañiles, incluyendo horarios de almuerzos y retrasos. Esto lo necesito para contabilizar el pago a los trabajadores.

  3. Detalle del avance de obra, con desglose del trabajo realizado por cada albañil, por día. Esto lo necesito para planificar los días restantes del proyecto.

Al escuchar esto, el sobrino se puso pálido porque, en sus primeros 15 días, había hecho muchas cosas, pero no había anotado nada. Habría anotado todo si se lo hubieran pedido. Hasta le habría preparado una presentación, pero no se lo pidieron.

“¿De qué te graduaste?”, le preguntó el arquitecto.

“Máster en Administración de empresas”, contestó su sobrino, mientras agachaba la cabeza.

Conclusión:

Los buenos administradores son personas proactivas a las que les gusta anotar y controlar todo. Si no te consideras una persona controladora, estudia otra cosa.